jueves, 6 de agosto de 2009

Una perspectiva distinta de ser XXY: ¿No será un Privilegio?



Por: Onni Neko
(Publicado previamente en: www.xxyaware.blogspot.com)


Frente a las puntualizaciones que ha hecho la comunidad médica acerca de la presencia de problemas de aprendizaje en las personas XXY, debo decir que sospecho que con un ritmo educativo distinto, y tiempo, la o él XXY promedio desarrollaría un esplendor intelectual que nada habría de envidiar a la o el XX y la o el XY promedio.

Me explico. L@s XXY maduramos más despacio. Es de sobra conocido que l@s niñ@s aprenden mejor y más rápido que l@s adult@s. Una persona XXY completa su desarrollo a lo largo de un periodo considerablemente más largo que una niña o niño XX o XY; en promedio, unos ocho años más tarde. El periodo de desarrollo en los varones y hembras genétic@s es muy corto. Las sociedades del 99% del mundo consideran que, a los 18 años, la persona alcanza la madurez adulta. Sin embargo, l@s XXY (siempre y cuando no hayan sido sometid@s a intervención hormonal), terminan de madurar física y psicológicamente alrededor de los 25 años. Si comparamos a una persona XXY de 25 con una persona XX o XY de 18 (que son las edades equivalentes en términos de madurez relativa), la persona XXY obtiene puntajes significativamente más altos en pruebas de inteligencia. La comunidad médica no ha prestado suficiente atención a este hallazgo.

Y, a pesar de todos sus intentos por combatir y suprimir el "Síndrome de Klinefelter", mi experiencia apunta a que l@s XXY ocupamos un porcentaje alto de profesiones altamente cualificad@s en proporción con nuestra presencia estadística en la población (somos 1 entre 500 a 1 entre 1000). No tengo un estudio que lo pruebe y es un pendiente que sugiero sea tomado en cuenta por el activismo intersex.

Las puntualizaciones de la comunidad médica no han tomado en cuenta que l@s XXY competimos en un sistema que no fue diseñado para nosotr@s. Si nosotr@s no maduramos hasta los 25, y si nuestras familias nos lanzan al mundo a los 18 años para que nos hagamos "hombres" (nótese también la ironía del género), en esencia nos están lanzando al mundo a los 14 años. Un chico de 14 podrá ser muy inteligente, pero sencillamente, le falta la madurez que se requiere para la supervivencia en sociedad. Entonces, el ritmo socio-educativo y cognitivo que se nos aplica no es el adecuado en cuanto no concuerda con el ritmo de nuestro reloj biológico.

Por otra parte, en la universidad se utiliza un método de enseñanza que funciona para un porcentaje de la población, pero no para l@s XXY. Durante mi vida universitaria, me di cuenta que asistir a medio tiempo, tomando dos o tres clases por semestre, me funcionaba mucho mejor. De esas dos o tres materias, terminaba profundizando cinco veces más que el promedio de mis compañer@s, porque el cerebro XXY funciona buscando explicaciones exhaustivas de cualquier teorema o procedimiento.

Desafortunadamente, los exámenes universitarios están diseñados para evaluar a la o el estudiante acerca de porciones específicas del conocimiento, usualmente vinculadas a la memoria de corto plazo. El cerebro XXY no funciona así. En mi caso, mi memoria de corto plazo es frágil, pero pueden pasar 20 años y puedo volver al cálculo integral como si lo hubiera aprendido ayer. L@s XXY hacemos esto con la misma facilidad que una o un profesional de las matemáticas, y ello se debe a nuestra potente memoria de largo plazo. La posibilidad de regresar con exactitud al momento en que alguien enunció o escribió una idea, y la explicó, nos permite retomar esa idea varias décadas después.

Les digo entonces a l@s XXY que son inteligentes, que no se dejen frustrar por un sistema educativo que no está diseñado para nosotr@s y que, por lo tanto, puede hacernos creer que somos perdedores (as) en él. Sabiendo de nuestra diferencia, planifiquemos nuestros estudios a nuestro propio ritmo y aprovechemos los años extra de inmadurez y juventud que nuestra particular biología nos ha regalado, pues son esos, precisamente, los valiosos años en que el aprendizaje mejor se da.


1 comentario:

  1. hola soy andres.
    mmm ahora me doi cuenta, porque fui tan inmaduro cuando entre a la universidad, cuando tenia 19 años.. al tercer año desistí de la carrera, por un tema vocacional..y a los 22 entre realemnte lo que me gusta, tengo 24 años y veo que sobresalgo mucho mas que otro compañeros de mi curso...nada que envidiarle a un xy, sin mayor esfuerzo paso mis ramos...a veces creo, que si realemnte estudiara como se debe..nadie me pararia.

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